Todo lo que tienes que saber si estás pensando en instalar un switch

¿Tienes dudas sobre los diferentes tipos de switches, sus funciones u homologaciones? No te preocupes, este articulo técnico de Esteban García, responsable del área de Automatización Industrial de Grupo Elektra, te lo deja todo clarísimo.  ¡Guárdalo en tus favoritos y consúltalo siempre que lo necesites!

1. Introducción

Lo primero de todo es recordar para qué necesitamos un switch, cuál es su cometido en nuestra instalación industrial. Un switch tiene la capacidad de conectar múltiples dispositivos en una red local LAN (Local Area Network). Estos dispositivos pueden compartir recursos entre ellos gracias a los puertos que dispone el switch y que permite su interconexión.

Una vez dejado claro esto, la primera pregunta que tenemos que hacernos para decidir la gama de producto que mejor nos conviene es la siguiente: ¿switch gestionable o no gestionable?

2. Switch no gestionable

Un switch no gestionable es un equipo plug and play. Basta con alimentarlo y se establecerá la conexión entre sus puertos. Ojo, es importante no confundir este tipo de switches con los hubs: el hecho de no teber que configurarlos a la hora de ponerlos en marcha no quiere decir que no dispongan de unas características y configuraciones que vienen por defecto para evitar que choquen las tramas del tráfico (pero no son configurables por el usuario).

Los switches no gestionables son adecuados para instalarlos en los extremos de nuestra red a nivel de sensor, donde necesitamos recoger unas pocas señales y trasmitirlas por nuestra red LAN.

3. Switch gestionable

Por otra parte, un switch gestionable, además de todo lo dicho para los switches no gestionables, dispone de funciones y opciones para configurar el tráfico de la red a nivel de capa 2. Estos equipos permiten monitorizar el tráfico de la red, por lo que tendremos mayor información de lo que está pasando con los dispositivos conectados y mayor control sobre ellos.

La ventaja de saber de manera individual qué ocurre con cada puerto y a la vez poder configurar los mismos nos permite crear redes virtuales denominadas VLAN (Virtual Local Area Network). Esta opción nos da la capacidad de dividir nuestra red LAN en diferentes VLAN para gestionar de una manera más optima nuestra red.

3.1 Funciones de un switch gestionable

Algunas de las funciones de un switch gestionable son:

3.1.1 Link Aggregation

Es decir, agregación de enlaces. Se trata básicamente de la posibilidad de aunar puertos para aumentar la velocidad del servicio o disponer de un servicio redundante.

3.1.2 QoS

Es decir, calidad de servicio. Esta función nos da la posibilidad de crear reglas para priorizar unos servicios sobre otros.

3.1.3 SNMP

Esta opción nos permite monitorizar de manera remota el estado de la red en tiempo real.

3.1.4 VLANs

Nos facilita la creación de varias redes privadas dentro de un mismo switch o LAN.

3.1.5 Port Mirroring

Posibilidad de disponer de un puerto que sea el espejo de uno o varios puertos para su análisis o monitorización.

Este tipo de switches gestionables ya se está utilizando con buenos resultados en máquinas individuales o a nivel de planta. Como hemos visto, sus características nos ayudan a disponer de una red donde es posible tener un mayor grado de información y control de lo que está sucediendo.

Existen en el mercado gamas de producto de switches denominadas Lite que disponen de ciertas funciones de los switches gestionables. Se trata de una gama que está a medio camino entre ambos tipos de switches (gestionables y no gestionables). Su elección puede abaratar el coste de la instalación, pero aconsejamos estudiar bien qué prestaciones son las que realmente necesitamos en nuestro proyecto y apostar por ellas.

4. Consideraciones a la hora de escoger el switch

4.1 ¿Dónde lo vamos a instalar?

Una vez hemos determinado el tipo de switch, tenemos que considerar qué formato es el que se adapta a nuestras necesidades de instalación. Para ello hemos de definir si necesitamos instalarlo en un rack de 19” o va a ir instalado en el panel de un armario.

4.2 ¿Qué tipo de cableado requiere nuestra instalación?

Es preciso medir la distancia entre los diferentes armarios y entre las zonas por donde vamos a cablear los diferentes switches o los equipos que se han de conectar a él, para decidir si necesitamos que las líneas sean de cobre, de fibra o necesitamos un equipo mixto.

4.3 ¿Qué velocidad y tráfico debe soportar?

También hemos de tener en cuenta los elementos que se van a conectar a nuestro equipo, con el objetivo de estimar el tráfico que van a soportar, así como el que van a generar hacia otras zonas. Averiguar esto es indispensable para determinar si necesitamos 10/100MB/ 1GB/5GB, etc.

4.4 ¿Números de puertos y tipo?

Después de decidir el tipo de cable que nos conviene es momento de contar el número de elementos que disponemos por cada tipo de cableado, e incluso tener en cuenta si queremos dejar algunas zonas libres para posibles ampliaciones.

4.5 ¿Necesitamos alimentar los equipos por el cable Ethernet?

Existe la opción de alimentar los equipos desde el propio switch o bien poniendo un inyector en la toma. Este procedimiento se denomina PoE (Power over Ethernet). En caso de optar por este tipo de alimentación hemos de considerar la intensidad por toma y la intensidad total de todos los equipos conectados.

4.6 ¿Dónde vamos a instalar el switch?

Factores como la temperatura ambiente o el polvo en suspensión son muy importantes a la hora de escoger nuestro switch. Para casos extremos de termperatura o exceso de partículas de polvo existe una gama muy interesante de switches rugerizados, es decir, fortalecidos con una protección extra.

Otro factor a tener en cuenta es su grado de protección IP, que le viene dado por como está construido el switch y la carcasa que lo protege.

4.7 ¿Cómo lo vamos a alimentar?

Según el suministro eléctrico que dispongamos en la zona donde lo vamos a instalar podemos optar por equipos en corriente continua o que dispongan de fuente de alimentación integrada para alimentarlos con corriente alterna, con una o dos entradas, en función de si necesitamos que disponga o no de redundancia de alimentación.

4.8 ¿Homologaciones especiales?

Dependiendo de la aplicación o la zona donde se instale el switch es posible que el dispositivo haya de ser valido expresamente. Por ejemplo para el sector ferroviario, el sector naval, ATEX, Vehículo E, etc. El uso final determinara qué normativa ha de cumplir nuestro equipo de switches.

Una vez llegados a este punto, cuando ya hemos decidido el switch que mejor nos conviene según su utilidad dentro de nuestro proyecto, es momento de pasar al siguiente punto: cómo convertir una planta con red plana en una planta con una red segura.

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